A través de un comunicado, la Arquidiócesis de Panamá informó este sábado la decisión de separar de sus funciones a los sacerdotes Rogelio Topin, Orlando Rivera y Karl Madrid por lo que califican de conductas “inapropiadas y escandalosas”.
“Hasta el momento, la Iglesia Arquidiocesana no ha sido informada de que exista alguna acusación en contra de estos presbíteros, pero se ha tomado esta previsión de suspenderlos con el fin de restablecer la justicia”, afirma el comunicado.
Esto surge después de una denuncia que se hiciera en contra de los sacerdotes antes mencionados, quienes habrían pagado para sostener relaciones sexuales con un joven extranjero.
Antes esta situación, la Arquidiócesis reitera su “posición de tolerancia cero ante cualquier clase de abuso, especialmente a menores y personas vulnerables”.
Por su parte, monseñor José Domingo Ulloa reaccionó ante la noticia con el siguiente mensaje: “Con mucho dolor y sufrimiento he vivido estas dos semanas. Inmediatamente supimos del caso, han quedado suspendidos y se ha iniciado una investigación canónica. En estos momentos estoy fuera del país”.
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