La selección de Estados Unidos se coronó campeona de la Copa Oro Femenino tras vencer, en un ajustado duelo, a Brasil por marcador de 1×0. Las norteamericanas encontraron el título gracias al gol de su capitana Lindsey Horan, quien anotó cercano al final del primer tiempo.
El reinado no tambalea
La escuadra estadounidense siguen consolidándose como la potencia líder del fútbol femenino, al menos, en todo el continente americano. Las estadísticas señalan que solo perdieron un juego en esta edición, dejando además un registro de un empate y cuatro victorias (incluida la de la Gran Final). En total, las campeonas anotaron 16 goles y recibieron 4, demostrando amplia superioridad en la mayor parte de la competencia. Solo sus contrapartes del norte, México y Canadá, resistieron y evitaron que la corona tuviera la joya de la imbatibilidad.
Entre tanto, en las distinciones individuales también hubo destacadas en el equipo ganador: Jaedyn Shaw se llevó el Balón de Oro como la mejor jugadora del torneo, a parte de ser reconocida como la máxima artillera de su selección con cuatro goles; la guardameta Alyssa Naher también brilló bajo los tres palos y se llevó título del Guante de Oro, como mejor portera del certamen. Además, todo el conjunto de Estados Unidos fue reconocido con el premio del Juego Limpio por el buen comportamiento de las jugadoras en materia de amonestaciones y expulsiones.
Menciones de honor
Brasil finalizó como subcampeona del certamen, rótulo decoroso para la selección ‘canarinha’ si se tiene en cuenta que fue la única selección sudamericana que alcanzó las semifinales, para posteriormente disputar la Final ante EEUU. En materia individual para la ‘verde-amarelo’, se destacó Bia Zaneratto, como una de las figuras en el ítem de asistencia, marcando dos.
Por su parte, la selección de Canadá, que perdió en Semifinales en los lanzamientos desde el punto penal, tuvo distinciones para Adriana León, quien fue la máxima anotadora del certamen (6 goles), mientras que Cloé Lacasse fue la jugadora que dio más asistencias (3), cifra que comparte con la colombiana Catalina Usme.
En cuanto a la competencia, se registró en total un promedio de gol de 3.36, resultado de 84 goles en 25 partidos. Adicional a lo visto en la cancha, informes por parte de Concacaf señalan que en promedio fueron 88,000 personas a las gradas para los diferentes encuentros del torneo, y que para la gran final se logró el récord de mayor asistencia para un partido de fútbol femenino de Concacaf: 32,000 espectadores acudieron al Snapdragon Stadium de San Diego para celebrar el título estadounidense ante Brasil.
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